Las uvas son cosechadas a mano en distintas zonas de gualtallary (alto, centro y bajo), donde en cada botella se logra la diversidad de este terroir.
Son vinos francos, honestos, austeros y verticales con la tipicidad mineral propia de los suelos calcáreos. Son fermentados con levaduras nativas y vinificados en concreto, con el propósito claro de obtener vinos honestos y con nervio.